“Los agresores están muy enojados porque los terroristas a los que apoyaban han sido derrotados en Guta Oriental”, insiste este sábado Rohani, en una reunión de altos funcionarios iraníes, celebrada en Teherán, la capital persa.
Este sábado, de madrugada, Siria ha sido objeto de una serie de ataques lanzados por las fuerzas estadounidenses, británicas y francesas, después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenara una agresión militar contra el país árabe.
Washington, Londres y París justifican el bombardeo como una respuesta al presunto ataque químico del Gobierno sirio en la ciudad de Duma, en la región de Guta Oriental. Sin embargo, el Gobierno de Bashar al-Asad ha rechazado tales acusaciones e incluso el uso de municiones químicas en dicha ciudad.
El mandatario iraní, no obstante, lamenta que EE.UU., los sionistas y algunos países occidentales “no hayan aprendido la lección” de sus intervenciones militares en la zona desde hace 17 años, y alude a las intervenciones de EE.UU. en Irak, Afganistán y Libia.
Rohani, además, ha hecho hincapié en que “la agresión” militar perpetrada por EE.UU. en la región “no tendrá otro resultado que la aniquilación y la destrucción”, aunque advierte de que el objetivo final de estas agresores occidentales es “justificar su presencia en la región”.
El jefe del Ejecutivo persa también ha reiterado el apoyo de la República Islámica al pueblo y Gobierno sirios ante “las invasiones extranjeras”, a la vez anima a la población siria a resistir para neutralizar las conspiraciones occidentales.
Irán y Rusia, los dos principales aliados de Siria, advierten de que el ataque químico de Duma es una mera excusa “sin fundamento ni base” de Estados Unidos para intervenir militarmente en territorio sirio.
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